¿Qué piensas cuando escuchas la palabra “dentista”? Quizá a tu cabeza viene la idea de resinas, amalgamas, el sonido de terror que hacen los aparatos, la temible anestesia o el “enjuáguese” seguido de un sabor amargo entre sangre y metal. Pero ¿has pensado qué pasa con la ortodoncia? ¿Quién la hace y qué arregla?
Si los brackets son tu único referente del tratamiento de ortodoncia, quédate a leer qué otras opciones hay y, sobre todo, cuáles son los problemas que puedes solucionar con esta alternativa.
Problemas más comunes
Brevemente, te contamos que los ortodoncistas se especializan en ciertos temas. Su expertise viene desde la carrera de odontología con los problemas más comunes. Sin embargo, estas personas se encargan de cuidar lo relacionado a la alineación de los dientes, la mandíbula y la mordida. Si quieres identificar al mejor profesional, tenemos los puntos que debes considerar aquí.
Específicamente, los problemas a perfeccionar con el tratamiento de ortodoncia son:
- Apiñamiento: es probable que hayas visto personas que tienen los dientes encimados o “chuecos”. Más allá de lo estético, a la larga esto puede traer problemas de salud relacionados con la falta de limpieza por no poder llegar a ciertas zonas durante el cepillado
- Mordida abierta: en este caso, los dientes no se tocan cuando cierras la boca. Puede suscitarse por un problema óseo, falta de espacio o en casos extremos, el uso prolongado de chupones o succión del pulgar cuando eras bebé
- Espaciamiento interdental: se refiere a los huecos entre una pieza y otra; como la dentadura icónica de Luis Miguel que años más tarde corrigió
- Sobremordida: en este caso, los dientes superiores abarcan la parte inferior como si los ocultaran y se recargaran en ellos. Hay casos tan extremos que la parte de arriba cubre totalmente la de abajo
Los brackets no son la única solución
Tal vez pudiste identificar algunos de los tópicos de los que te hablamos –Sí, ¡qué horrible gastar años de mi vida con metal en la boca!–. Pero no te preocupes, a nadie le agrada la idea de olvidarse de los elotes con chile del que pica por un tratamiento de ortodoncia o que el flash de las fotos destelle en las ligas, por eso hay otras opciones.
Los alineadores dentales son una gran decisión si quieres corregir tu sonrisa sin sufrir años en consultas desconociendo el resultado. ¿Lo mejor? En sólo seis meses tendrás los dientes perfectos disfrutando de lo que más te gusta en la vida.